Lo que apunté fue esto:
Será anhelo de grandeza lo que me lleva a soñar con gigantes? Será mi caprichoso y sobredimensionado ego encarnado?
La primera vez que soñe con un gigante, siendo específicos, con parte de él, fue hace un año.
Era una mañana. Me encontraba mirando el jardín interior de mi casa, jardín que no es más que una breve extensión de tierra habitada por dos tétricas sábilas. Junto a una de ellas se encontraba un avechucho, del tamaño de un gallinazo. Visto de perfil, parecía no tener pico sino una pequeño montículo semejante a una nariz. Lo que debía de ser su rostro y sobresalir, como en general pasa con todas las aves, era plano.
Era un ave extraña y no pude dejar de mirarla. De pronto, tornó su rostro 90º y se encontró mirándome fijamente. Era similar al de un ser humano, aunque los detalles estaban atenuados, como un tallado superficial. Sus ojos eran pequeños y rasgados, con un brillo desconcertante. Inesperadamente, empezó a graznar. Un ruido seco y retumbante que se quebraba cada tanto con agudos altos. Mi corazón se acongojaba y quería volarse. Yo no sabía si moverme, temía que el ave se lanzace encima mío.
En mi nerviosismo, alcé los ojos sobre el muro que separa mi casa de la del vecino, para dejar de ver a ese animal. En el vacío, a unos centimetros del término del muro, observé el momento exacto en el que una especie de puerta se "abrió" entre el aire. La manifestación de otra dimensión colándose en la mía. Un brazo enorme se deslizó por esa puerta y tanteo en el jardín hasta encontrar al ave que me tenía espantada. Cuando tuvo entre sus dedos al animal este graznó con más fuerza. Finalmente, el brazo gigante se llevó al ave y cerró la puerta.

Ese fue mi primer sueño de gigantes... Y sigo buscando una explicación.