jueves, 24 de junio de 2010

La despedida frustrada

Enlutadísima llega al hospital

Solo unas horas antes, ella había recibido una llamada telefónica desde el hospital. La frase con la que se su mente resumió todo fue: "Señora venga a ver inmediatamente a su esposo si aun quiere encontrarlo vivo".

Ella se tomo su tiempo en vestirse. Escogió con delicadeza un conjunto sobrio y los accesorios que entonasen. Seria la última vez que estaría ante su presencia. Él debía de verla perfecta.

- Que se muera rabiando al saber lo bien que estaré sin él.

Llegó justo cuando su cuñado cancelaba las medicinas y coordinaba el traslado a una clínica.

- ¡Andrea! Cuñada, debes ser fuerte. No te preocupes, todo estará bien. Ya he pagado los gastos al ver que tú no venias. Supuse que aun no te enterabas de nada. Pero qué es esa cara de susto? Ya te dije, todo estará bien. Ya hable con el doctor, Pepe es fuerte, se sobrepondrá de esto.

Andrea no tenía cara de susto. Sentía de todo menos susto.

- Gracias, Antonio. Qué haría yo sin José, qué haría yo…

No hay comentarios: